Escrito por Carmela Pérez, miembro de la Comisión de Diálogos Humanos del Equipo de Derechos Humanos.

El Derecho Inmobiliario es la rama del Derecho que se ocupa de todos los procesos relacionados a los bienes inmuebles y las propiedades. Tradicionalmente, el concepto de derecho inmobiliario es asociado con el derecho a la propiedad privada o a una vivienda digna, sin embargo, es capaz de abarcar mucho más que eso. También puede abarcar el derecho de las comunidades indígenas a la propiedad comunal o el desarrollo urbano sostenible. Dentro de las distintas disciplinas que convergen en el derecho inmobiliario se encuentra el urbanismo, que es el estudio de las ciudades e incluye la planificación y regulación de estas, así como el análisis de los procesos que ocurren en las ciudades. Uno de ellos es la gentrificación, el cual se abordará en el presente artículo.

¿Qué es la gentrificación?

La gentrificación es un proceso mediante el cual personas que forman parte de grupos socioeconómicos medianos empiezan a mudarse a sectores urbanos donde principalmente residen comunidades pobres o de clase trabajadora, que por lo general suele coincidir con vecindarios que históricamente han pertenecido a comunidades racializadas [1]. Debido a que las personas ingresantes suelen tener mayor capacidad adquisitiva, se produce un aumento en los precios de alquiler y renta de vivienda; y con el aumento del costo de vida y los cambios que se producen en la comunidad, se produce un desplazamiento de los antiguos residentes del área, que suelen ser personas racializadas o minorías étnicas.

De igual manera, mientras que se produce la gentrificación de una comunidad, las oportunidades económicas que esto representa aumentan (en la medida de que los precios de renta son comparativamente bajos a otras zonas urbanas de mayor costo o que ya han pasado por el proceso de gentrificación), provocando una nueva afluencia de personas que se trasladan al área para poder aprovechar los bajos costos y los nuevos mercados que se aperturan con los cambios en la comunidad [1]. Junto con el aumento del costo de vida, los consiguientes cambios en el mercado laboral suelen significar que los beneficios económicos se distribuyen de forma desigual, ya que el flujo económico se concentra en los elementos entrantes, más que en los residentes originales de una comunidad.

Impacto en las desigualdades sociales

En su mayoría, la gentrificación afecta desproporcionadamente a las comunidades compuestas principalmente por minorías étnicas o históricamente discriminadas, ya que produce un incremento en las brechas económicas, así como un desplazamiento y desmantelación de estas comunidades.

La gentrificación no es un fenómeno particularmente reciente, ya que, a pesar de que el término recién fue acuñado en 1964, durante los años 80’s y 90’s se popularizó su uso debido a que describía de forma clara los cambios observables que se empezaron a producir en las comunidades afroamericanas y migrantes en los Estados Unidos [2]. Un ejemplo de esto fue el desplazamiento violento que sufrieron los habitantes de la ciudad de Hoboken, una comunidad predominantemente constituida por migrantes puertorriqueños, que, tras el inicio del proceso de gentrificación en Nueva Jersey, fueron víctimas de una vasta cantidad de incendios,los cuales habían sido provocados para desplazarlos. Tras los incendios, la mayoría de residentes desplazados no regresaron a vivir en Hoboken, y se calcula que cerca de ocho mil personas se quedaron sin hogar [2].

En la actualidad, la gentrificación no suele ser acompañada por desplazamientos tan violentos, lo que dificulta establecer criterios claros para su detección y el establecimiento de objetivos para remediarla. Como explica Demsas, la gentrificación actual suele ser acompañada por microagresiones racistas o el desplazamiento pasivo de los residentes [2]. Asimismo, en el 2020, un estudio de la Universidad de Florida encontró que en las áreas en las que se produjo un aumento de residentes de clase media, también se produjo un alza en el número de llamadas a la policía, así como en los arrestos relacionados al “mantenimiento del orden público” [2].

Adicionalmente, la gentrificación ha sido vinculada a cambios en las legislaciones locales, ya que es vista como una forma de incrementar los ingresos tributarios [3][4]. Esto, a su vez, ha sido vinculado a la desregulación de los costos de vivienda, así como, la reducción de protecciones económicas a favor de la clase trabajadora [3].

Derechos que se infringen

Acorde a lo establecido por la Organización de Naciones Unidas (ONU), el derecho a un nivel de vida adecuado para el desarrollo personal incluye el derecho a una vivienda digna, lo cual está escrito expresamente en la Declaración Universal de Derechos Humanos. Además, en la Observación General N°4, realizada por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos durante el 6to período de sesiones de 1991 [5], se añadieron ciertas especificaciones al derecho a una vivienda digna, incluyendo algunas que se ven infringidas cuando se produce la gentrificación. Estas son:

1. Seguridad jurídica de la tenencia: Este aspecto del derecho a la vivienda digna se refiere a que, independientemente del tipo de tenencia que se tenga sobre la vivienda (ya sea de alquiler, cooperativa, propietaria, etc.), todas las personas deben gozar de cierto grado de seguridad de tenencia que les garantice una protección legal contra el desahucio, el hostigamiento u otras amenazas.*
2. Gastos soportables: Este aspecto se refiere a que los gastos personales o del hogar que entraña la vivienda deberían ser de un nivel que no impidiera ni comprometiera el logro y la satisfacción de otras necesidades básicas, siendo proporcionales a los niveles de ingresos de los habitantes. Asimismo, esta especificación establece que se debe proteger a los inquilinos contra niveles o aumentos desproporcionados de los alquileres.*
3. Lugar: Este aspecto se refiere a que la vivienda adecuada debe encontrarse en un lugar que permita el acceso a las opciones de empleo, los servicios de atención de la salud, centros de atención para niños, escuelas y otros servicios sociales, ya que los costos de movilización para acceder a estos servicios puede imponer exigencias excesivas en los presupuestos de las familias pobres.*

También, la gentrificación vulnera el derecho de las personas a la propiedad, debido a que, al volverse tan elevado el costo de vida, muchas personas se ven obligadas a disponer de sus viviendas, ya que no es rentable continuar residiendo en un lugar en el cual los ingresos propios no son suficientes para sostener a uno mismo [6]. De igual forma, como visto previamente, la gentrificación afecta de forma desproporcionada a las comunidades racializadas o minoritarias, perpetuando la discriminación sistémica y las brechas sociales y económicas.

Conclusión

Tal como lo evidenció The Guardian en el 2016, la gentrificación no es un fenómeno restringido a ciertos países, sino que sucede de forma global [6]. Este fenómeno afecta a personas viviendo tanto en países desarrollados como a países en vías de desarrollo, y produce enfrentamientos entre los residentes antiguos de las comunidades y la nueva afluencia de personas perturbando el derecho al bienestar de todas las personas involucradas. Asimismo, la gentrificación vulnera el derecho a la propiedad y a la vivienda digna, ya que no permite que las personas continúen residiendo en el lugar en el que está localizada su vivienda. Finalmente, al producir el desplazamiento de las personas fuera de sus comunidades, la gentrificación vulnera la identidad cultural y social de las personas, ya que las fuerza a abandonar sus lugares de residencia al no permitir que estos continúen siendo asequibles para ellos.

Es por esto que es responsabilidad de los Estados (y de los miembros de la sociedad civil que estén involucrados en las transacciones inmobiliarias) garantizar que la gentrificación no continúe desplazando a las personas de sus residencias, ya que esto constituye una vulneración a sus derechos. De igual forma, la imperatividad de la situación se incrementa al considerar que las personas que se encuentran principalmente afectadas por este fenómeno forman parte de comunidades históricamente excluidas.

* Lo puesto en cursiva constituyen citas textuales de la Observación General 4°

Bibliografía
[1] National Geographic. (2022). Encyclopedic entry, Gentrification. National Geographic.
https://www.nationalgeographic.org/encyclopedia/gentrification/
[2] Demsas, J.. (2021). What we talk about when we talk about gentrification. Vox.
https://www.vox.com/22629826/gentrification-definition-housing-racism-segregation-cities
[3] Hackworth, J. & Smith, N. (2000). The Changing State Of Gentrification. Wiley Online Library.
https://doi.org/10.1111/1467-9663.00172
[4] O’Brien, K., Vilchis, L. & Maritescu, C. (2019). Boyle Heights and the Fight against Gentrification as State Violence. Project Muse.
https://muse.jhu.edu/article/728851/summary
[5] Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR). (1991). Observación General N°4. OHCHR.
https://www.acnur.org/fileadmin/Documentos/BDL/2005/3594.pdf
[6] Perry, F. (2016). ‘You are left with no choice but to leave’ – your stories of long-term gentrification. The Guardian.
https://www.theguardian.com/cities/2016/jan/13/no-choice-leave-displacement-tales-long-term-gentrification-six-cities